En la semana del 15 al 21 de octubre tuvo lugar la
‘Semana Europea de la Democracia Local’ en la ciudad de Málaga. Durante la misma ha habido diversos actos donde han participado concejales del
Ayuntamiento de Málaga, directores de área y de distrito, y también el alcalde, Francisco de la Torre. Por desgracia, nada tienen que ver los actos de esta semana con el apoyo a la democracia real, a pesar del nombre. Las
previsiones de asistencia y/o participación eran de 15.000 personas, mientras que en Málaga la población total es de 561.250 habitantes.
Por otro lado, aquellos malagueños que más necesitan el apoyo y el respaldo del gobierno local no han tenido protagonismo ni por asomo. En el día en que
participó el alcalde en un acto al modo de ‘Tengo una pregunta para usted’, la gran mayoría de asistentes fueron personas mayores de asociaciones de vecinos, más preocupadas por las cacas de perros de sus parques y por la visita de las autoridades a sus sedes, que por los vecinos de sus barrios que están siendo desahuciados, perdiendo sus hogares a causa del paro.
En Málaga, cada día, 6 familias son notificadas para ser desahuciadas, pero de esto no se habló en estas jornadas. Tampoco parece que al Ayuntamiento de Málaga le preocupe mucho el 35% de la población malagueña que estará sin trabajo a final de año, según el último estudio de Unicaja.
Es evidente que este tipo de jornadas, impulsadas desde la
Unión Europea, se quedan en palabras, fotos, carteles, y poco más, lo cual es una verdadera lástima tanto por el dinero invertido en ellas como, especialmente, por la verdadera necesidad que la sociedad tiene de que la democracia local tome fuerza. Y es que no puede haber verdadera democracia lejos del lugar donde las familias viven cotidianamente, esto es, en sus calles, barrios y ciudades.
Frente a esta parodia de acercamiento de las instituciones políticas locales a sus ciudadanos, la sociedad malagueña busca por otras vías la verdadera democracia local.
Autogestión = Democracia
Durante esa misma semana en Málaga ha habido diversas protestas de trabajadores despedidos, familias
desahuciadas, profesores y estudiantes.
Cabe mencionar con especial alegría el acto del día 17 de octubre que tuvo lugar en la zona del Centro Comercial Vialia, en la estación de tren de Málaga, donde militantes del
Partido SAIn (Solidaridad y Autogestión Internacionalista) alzaron la voz por una verdadera democracia local, es decir, por la autogestión solidaria de la sociedad, libres de subvenciones lacayas con el poder y que ponga a la persona y al trabajo por encima de cualquier beneficio económico.
Frente al silencio y a la pantomima de plató de televisión del alcalde De la Torre (fue televisado por un equipo de tres cámaras para
Onda Azul TV, la televisión municipal de Málaga), el Partido SAIn denunció bien alto la lacra de la especulación de la vivienda que favorece a la banca y oprime a las familias.
Mientras éstas pierden sus trabajos y sus condiciones laborales son cada vez peores, la banca es financiada con dinero público, a pesar de que siguen obteniendo enormes beneficios. Es lamentable que se celebren
unas jornadas de ‘democracia local’ que dan la espalda a los verdaderos problemas y preocupaciones de los ciudadanos.
Pero pese a ello, la esperanza crece gracias a la toma de conciencia de cada vez más personas que se animan a la lucha por un mundo justo y solidario. ¡Ánimo pues!